Después de probar el prototipo, se puso en producción una variante comercial designada KD-1A.
En 1935, el Ejército de los Estados Unidos compró un KD-1 para evaluarlo y lo designó YG-1; le siguió una segunda aeronave, que tenía equipamiento de radio adicional y que fue designado YG-1A.
A estas dos aeronaves les siguió un lote de siete aparatos designados YG-1B.
En 1942, se compraron siete más para usarlos en la misión de observación, como XO-60.
El XR-2 resultó destruido por problemas de resonancia suelo del rotor y la evaluación continuó con otro YG-1B, designado XR-3.