Conocido como el inventor de la laufmaschine (máquina de correr) que después se denominó draisiana, fue el precursor del que sería posteriormente el velocípedo y actualmente la bicicleta.
Tras esta etapa, se dedicó a temas forestales en Schwetzingen y en 1810 era inspector forestal sin un distrito determinado en el Gran Ducado de Baden, pero un año después abandonó el servicio para dedicarse a sus invenciones.
En 1829 sacó una máquina de escribir estenográfica para 16 letras que grababa ya en una cinta perforada.
Drais era un demócrata y durante los motines de soldados en 1849, en el marco de la llamada Revolución de Baden, renunció públicamente a su título nobiliario, pero tres meses más tarde los ocupantes prusianos le obligaron a aceptarlo otra vez.
Su tumba se encuentra en el cementerio principal de Karlsruhe.