Kallocaína

En la novela se retrata un futuro de terrorífica monotonía.

Un aspecto importante de la novela son las relaciones y conexiones entre los varios personajes, como el matrimonio del personaje protagonista y su mujer Linda Kall, con los sentimientos de celos y sospecha que puede surgir en una sociedad con vigilancia pesada e incertidumbre legal.

Tanto Un mundo feliz de Aldous Huxley (1932) como Kallocaína de Boye transcurren en mundos que son una distopía farmacológica, es decir, sociedades en las que los fármacos se emplean para suprimir la oposición a autoridad.

Sin embargo, a diferencia de Un mundo feliz, donde los fármacos se emplean generalmente para suprimir el impulso a la disidencia, en Kallocaína se emplea un fármaco para detectar pensamientos y actos individuales de rebelión.

Leo es un científico, que inicialmente es muy leal al gobierno y desarrolla un suero de verdad denominado Kallocaína.