Julián Martínez-Simancas Ximénez

Su vida militar se desarrolló principalmente en el Protectorado español de Marruecos, donde intervino en diferentes acciones castrenses.

Los días siguientes dio protección a un convoy que llevaba agua y trasladaba heridos desde Nador a Tauima, realizó un reconocimiento ofensivo sobre el Zoco el Jemis de Beni bu Ifrur, en el que sostuvo un rudo combate, y auxilió a las tropas de ingenieros en sus trabajos de fortificación en Nador.

A las órdenes del teniente coronel Luis Fernández de Castro y Tomás y a bordo del vapor "Vicente Ferrer", en marzo de 1913 se trasladó con su Batallón a Larache, de donde pasó a Alcazarquivir, para realizar reconocimientos por las inmediaciones del río Lucus, prestó servicios de fortificación y seguridad en Arcila, socorrió al fuerte del Zoco el Tzenin, atacado por los moros, con los que se enfrentó en duro combate y, seguidamente, protegió convoyes, prestó servicio de seguridad en las posiciones y en el mes de junio se halló en el combate sostenido el día 12 en el Zoco el Tzenin a las órdenes del comandante general del Territorio, Manuel Fernández Silvestre.

El excesivo esfuerzo que llevó a cabo durante esos meses le hizo enfermar, por lo que en julio le fueron concedidos dos meses de licencia para Córdoba y Madrid.

Inmediatamente entró en operaciones, participando en el mes de mayo en la ocupación de varias posiciones, mereciendo su comportamiento el ser citado como “Distinguido” en la orden del Cuerpo.

A partir de 1917 y durante los siguientes años fue secretario del coronel jefe del Regimiento, cesando en este cargo y en el destino al pasar en comisión como profesor a la Academia de Infantería en 1920.

Durante 1932 realizó con su Tabor supuestos tácticos, ejercicios de fuego real y reconocimientos, fue jefe de la posición de Teffer y participó en maniobras del Grupo, hasta que en septiembre dejó el mando de su unidad al haber sido nombrado comandante mayor del Grupo, cargo en el que fue relevado en julio del año siguiente, en que tomó el mando del 1.er Tabor en Alcazarquivir, con el que se trasladó en septiembre al campamento del Jemis de Beni-Arós.

En Larache coincidirá con el capitán Rafael Sánchez Gallardo, cuya hija María Victoria Sánchez de Nogués y Gallardo casará, años más tarde, con su hijo Víctor Martínez-Simancas García.

En los días siguientes emplazó ametralladoras en el Hacho para defensa de los ataques aéreos, y sufrió bombardeos desde el aire y procedentes de la escuadra demócrata republicana.

En abril se trasladó a Burgos para formar parte de la ponencia encargada de presentar programas y planes de instrucción para las academias militares, y a su vuelta se incorporó a su Academia en Riffien, donde había sido trasladada.

En 1939, sin haber podido luchar en el frente, pese a sus numerosas peticiones en ese sentido, cayó enfermo y fue trasladado al Hospital Militar de Tetuán, donde falleció el 9 de junio.