Juan I de Holanda

Teodorico, conde de Clèves, Juan de Avesnes y Wolfert I van Borselen se disputaron durante algún tiempo su tutela.

Sin embargo, Van Borselen, más hábil, habiendo recibido a Juan en Veere a su vuelta de Inglaterra, se atribuyó la regencia.

Sus extorsiones y sus violencias, pero sobre todo los cambios monetarios, con los que los comerciantes se sentían muy molestos, le atrajeron el odio de toda la nación.

Van Borselen creyó poder salvarse huyendo a Zelanda con su joven pupilo; pero fue arrestado y trasladado a la prisión de Delft, donde fue masacrado por el populacho el 1 de agosto de 1299.

[1]​ Juan de Avesnes, conde de Henao, su pariente más próximo, que había disputado la regencia a Van Boserlen, se apoderó de ella tras su muerte.