En 1966, por encargo del ayuntamiento de Gáldar, presidido en ese momento por Antonio Rosas Suris, realizó la escultura en granito artificial del patricio natural de Gáldar, Esteban Ruiz de Quesada, más conocido como Capitán Quesada.
En su trayectoria, desarrolló una extensa producción escultórica, recorriendo varios países de Europa y África con el fin de ampliar su formación y su técnica.
En los años setenta residió en Argentina, desde donde organizó diversas exposiciones en Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, San Carlos de Bariloche, Santiago de Chile, así como varias en Neuquén.
Fue en Argentina donde llevó a cabo diversos encargos oficiales, siendo el principal el monumento Piedra del Águila en 1976, en la que el escultor talló directamente en la roca figuras de treinta metros inspirándose en la historia autóctona del pueblo.
[4] Tan solo tres días antes había culminado la obra Santiago el peregrino, que fue finalizada en su estudio de San Isidro y que donó al municipio con motivo de la celebración del primer Año Santo Jacobeo del II Milenio.
Al fallecer donó su patrimonio escultórico a su ciudad natal, que incluyen un conjunto de 19 obras distribuidas por distintos puntos de la ciudad y que conforman la denominada 'Ruta Borgiana'.