Estudió abogacía, especializándose en temas políticos, sociales y sindicales.
Más tarde fue nombrado Delegado de Sindicatos y Consejero provincial en Guipúzcoa.
Posteriormente fue nombrado gobernador civil de Córdoba, cargo que ostentó entre 1961 y 1964.
En aquellos años de Ros tuvo que hacer frente al problema minero.
Estaba casado con Ana Cerezo Enríquez, con quien tuvo tres hijos: José Manuel, Rafael y Francisco de Borja.