José Barba y Bendad

En la ciudad se ordenó sacerdote y formó una generación de músicos —cantores e instrumentistas como Juan Carreras y Dagas o mosén Domènec Murtra—, con lo que contribuyó a reavivar la vida musical de la ciudad y las comarcas cercanas.

También se presentó sin éxito a las oposiciones para el magisterio en Sevilla (1826) y Catedral de Toledo.

Su repertorio consiste principalmente en obras de carácter religioso (misas, himnos, tedéums, responsorios, villancicos y oratorios), que se conservan mayoritariamente en diversos fondos musicales de Cataluña.

También fue autor del Tratado metódico teórico-práctico de composición de canto gregoriano, en español y francés, que quedó inacabado e inédito.

François-Joseph Fétis mostró interés por una pieza didáctica suya que no se llegó a publicar.