A lo largo de seis décadas lanzó marcas de muñecas como Cocolín (Chiquitin en chile), Mateo o Miryam, y destacó por sus campañas publicitarias bajo el eslogan «Jesmar para jugar».
[2] En 2019, la juguetera alicantina Falca se hizo con los derechos de la marca y la relanzó en el mercado español.
[3] Jesmar fue fundada en 1946 por Jesús Juan y María Pérez, un matrimonio alicantino.
[2] Toda la empresa se asentó sobre un modelo de gestión familiar.
[4] En 1982, la empresa se convirtió en sociedad anónima y apostó por la expansión internacional, así como por la publicidad en televisión a partir de los años 1990.