Obtuvo varios premios para llevar a cabo proyectos importantes en la década de 1790.
Durante el Primer Imperio Francés, Thibault se trasladó a los Países Bajos, donde quedó a cargo de transformar el Palacio Real de Ámsterdam en la residencia real y en acondicionar el Ayuntamiento.
En 1804, Louis Bonaparte adquirió el château de Saint-Leu y un hôtel particulier parisiense en la calle Cerutti.
En 1805, terminó con Barthélemy Vignon (1762-1846) el castillo de Malmaison para la emperatriz Josefina.
Murat había comprado el palacio de Elíseo en 1806, y encomendó a Thibault y Barthélemy Vignon, acometer las transformaciones del palacio.