Jean-Baptiste Goy (París, 1666-1738) fue un escultor y sacerdote católico francés.
[1] Durante el tiempo de su pensionado en Roma, iniciado con poco más de catorce años, copió algunas de las obras más estimadas de la antigüedad para ser enviadas a Francia con destino a la decoración del nuevo Versalles.
Según un inventario de 1686, de las esculturas existentes en el palacio de Versalles y sus jardines, correspondían a Goy la copia del grupo de Apolo y el dios Pan o Marsias y Olimpo de la colección Ludovisi —copia romana de un original helenístico—, llamado, según el Recueil des statues, groupes, fontaines..., du chateau & parc de Versailles de Simon Thomassin (1694), Sátiro que enseña a un joven a soplar la siringa, grupo en mármol de 158 cm de alto colocado desde 1877 en la arboleda del salón de baile, y la copia, actualmente perdida, del Pequeño fauno o Fauno flautista conservado entonces en la Villa Borghese y actualmente en el Louvre, copia romana de un presumible original en bronce del siglo IV a. C., de la que, por encargo de Luis XIV, se hicieron otras tres copias, buena prueba de la celebridad de la obra.
[2][3] También en Roma y por encargo de Luis XIV hizo una copia en mármol de la Cleopatra o Ariadna dormida de los Museos Vaticanos,[4] y otra del Camilo —Sacrificante Borghese— de los Museos Capitolinos, un bronce romano de mediados del siglo primero cuya copia en mármol por Goy, atestiguada en Versalles por el Recueil de Thomassin, fue trasladada más tarde a Marly y en la actualidad se encuentra perdida.
[7] En su testamento, firmado el 26 de noviembre de 1736, dejaba sus libros a la iglesia en la que había servido durante más de dos décadas para formar con ellos una biblioteca parroquial.