James Pratt y John Smith

[4]​ James Pratt era un palafrenero[3]​ que vivía con su esposa y sus hijos en Deptford (Londres).

[3]​ En el juicio, no hubo testigos que avalaran la personalidad de Smith.

Pratt y Smith solo habían sido condenados porque no podían permitirse más que el uso de una habitación en una casa de huéspedes, en la que habían sido espiados con facilidad.

[12]​ El tamaño de la multitud posiblemente fuera porque era la primera ejecución realizada en Newgate en casi dos años.

[13]​[Nota 3]​ El acontecimiento tuvo la suficiente importancia para que se imprimiera y vendiese una octavilla.

La octavilla describía el juicio y la ejecución, e incluía el texto de una carta final supuestamente escrita por John Smith a un amigo.

Ejecución en la cárcel de Newgate, a principios del siglo XIX