Iznogud

En efecto, el objetivo del envidioso y traicionero visir no es otro que el que expresa con su frase típica: Para ello, ante la pasividad bobalicona de Harún, se dedica a conspirar interminablemente, con la ayuda de su torpe pero fiel ayudante Dilá Lará (Dilat Larath en la versión original),[3]​ fracasando estrepitosamente en cada uno de sus complots.Cuando se les señaló este particular, los autores replicaron con una serie de historietas breves titulada Les Retours d'Iznogoud, en la que se cuenta cómo los personajes lograron salir de las apuradas situaciones en que terminaban en los álbumes anteriores.Ello ayudaba también a compensar la "justeza" argumental, puesto que todas las historietas giran en torno al mismo hilo, si bien, aprovechando que se desarrollan en el Bagdad de Las mil y una noches, Goscinny hizo uso de toda la fantasía que quiso: magos, genios, alfombras voladoras, maestros del hipnotismo, viajes espacio-temporales, etcétera.En la década siguiente también se publicaron historietas cortas del visir en el suplemento infantil El Pequeño País, y la editorial SARPE publicó entre 1984 y 1985 diversas aventuras del personaje en la revista Fuera Borda.[4]​, aunque será la editorial Grijalbo-Junior la primera que publique la serie en una colección en formato álbum.
Representación de Iznogud
en un mural de Ginebra ,
en la valla de un parque
llamado Galiffe.
Lomos de los álbumes 1-5, 7, 8, 10-13, 16, 19 y 21 de la edición de Dargaud.
Lomos de la integral publicada por Rombaldi.
Flavia Scuderi muestra un dibujo de Batman en la ed. del 2016 del Comic-Salon Erlangen ;
detrás, Dilá Lará, Iznogud y el califa Harún El Pussah, con firma de Nicolas Tabary, hijo de Jean