También incluye a aquellos que experimentan dolores o molestias post-ejercicio inusualmente severos, fatiga, u otros efectos negativos.
La intolerancia al ejercicio es ya considerada una enfermedad, con propuesta de nombre "Enfermedad sistémica de intolerancia al esfuerzo", entendiendo como esfuerzo, el físico, intelectual, y emocional.
Varias condiciones cardíacas tales como la arritmia o una insuficiencia de válvula aórtica, si es lo suficientemente severa, pueden causar problemas tales como falta de aliento y/o intolerancia al ejercicio.
[1] Existen ciertas enfermedades, donde el ejercicio físico y en particular la rehabilitación, puede estar contraindicado.
Entre estas condiciones se incluye: La clave consiste en curar la enfermedad causal, o al menos mitigar las lesiones, para que el paciente pueda realizar actividad física.