Intento de asesinato de Fernando el Católico

Días después fue ejecutado en Barcelona por desmembración y el resto de su cuerpo quemado en la hoguera.Según Vicens Vives, probablemente «Juan de Canyamás aprovechó tal oportunidad para mezclarse con los síndicos y llegar a las inmediaciones del rey y asestarle su rudo golpe, lo que explicaría la facilidad que tuvo para descargar la cuchillada».Al parecer llevaba la espada corta escondida bajo la capa y según las crónicas de la época solo faltó un «hilo de araña» para que le cortara la cabeza al rey ―le hizo una herida que iba desde la oreja hasta la espalda―.El rey herido y medio desmayado fue conducido al Palacio mientras se llamaba a «tots los físichs e chirugians d’esta ciutat per medicinar-li la naffra» (‘todos los médicos y cirujanos de la ciudad para curarle la herida’).Según este mismo cronista, cuando el asesino fue interrogado en la cárcel a donde fue conducido «confesó que havia envidiado al Rey por sus buenas venturas; y confesó que el diablo le decía cada día a las orejas: ‘Mata a este rey, y tu serás rey, que este tiene lo tuyo por fuerza'».
Plaza del Rey de Barcelona en cuyas escalinatas tuvo lugar el intento de asesinato del rey Fernando II de Aragón .
Representación del atentado en el Dietari de l'Antich Consell Barceloní , vol. III.