Los incendios forestales son multicausales, se deben a las altas temperaturas asociadas al cambio climático[1]a las sequías intensas que han afectado ecosistemas claves para el sostenimiento del planeta como la selva tropical húmeda en Brasil y Venezuela, los bosques secos en Bolivia y los páramos en Colombia, entre otros.[3]Su impacto mermará la capacidad regional de las selvas y bosques para mitigar el cambio climático.[5] Entre los antecedentes recientes se identifican los siguientes aspectos: Esta sección complementa el articulo principal: Incendios forestales en Bolivia de 2024.[14]La cantidad de incendios ha aumentado exponencialmente y ha doblado los registros del año inmediatamente anterior.[36]El fuego ha afectado las regiones de Azuay, Carchi, Cotopaxi, Chimborazo, Guayas, Imbabura, Loja y Pichincha.[41][42] Los incendios forestales en Argentina se propagaron durante los meses de agosto a octubre en el centro del país.En Córdoba, el fuego ha estado presente durante varias semanas, con focos en localidades como Villa Berna, Salsacate y Capilla del Monte, entre las más afectadas[44].Según datos oficiales, los incendios en esta provincia han destruido aproximadamente 35.200 hectáreas en lo que va del año.[37] Dichos diagnósticos se realizan con imágenes y toma de datos que permiten dimensionar no solo el daño ocurrido, sino los pasos a seguir para recuperar las zonas.