Ignacio Clemente Delgado Cebrián

En esa ciudad ingresó en el Convento de Santo Domingo donde terminó sus estudios y fue ordenado sacerdote.

Resultaron ser los primeros misioneros occidentales que llegaban a Tonkin desde hacía 20 años.

Fue entonces cuando el vicario provincial, Feliciano Alonso, le entregó la dirección del seminario y la procuración de la misión, y le nombró junto a él pro vicario apostólico, para que si fallecía antes de que la Sagrada Congregación nombrase sucesor la misión no se quedase sin cabeza.

Fue enterrado en el mismo lugar del suplicio, aunque después sus restos acabaron sepultados en Bui-chu.

Su cabeza fue expuesta durante tres días como escarmiento para los cristianos y después fue tirada a lo más hondo del río; sin embargo un pescador la sacó incorrupta entre sus redes el 1 de noviembre de ese mismo aciago año.