La iglesia se ubica en la localidad guadalajareña de Budia, en Castilla-La Mancha.
Este templo, dedicado a san Pedro Apóstol, inicia su construcción a principios del siglo XVI y se da por finalizado a finales del mismo, aunque como tantos otros edificios de este tipo, sería objeto de sucesivas reformas.
La portada, de estilo plateresco, se habría edificado a mediados del siglo XVI.
Es de cuidada talla, con adornos vegetales, medallones y bichas, entre otros.
La capilla mayor se cubre con una cúpula de media naranja sobre pechinas rematada con una linterna.