Iglesia de San Marcos (Salamanca)
Fundada a principios del siglo XII, esta Iglesia de San Marcos se encuentra a las afueras del casco histórico de Salamanca (España), ubicado en “Puerta Zamora”.La ciudad típicamente medieval, en su parte noroeste, junto a la “Puerta Zamora”, con baja densidad demográfica, se agrupa una comunidad parroquial, caracterizada por castellanos.A pesar de la mala documentación, a partir del siglo XVI se sabe que había dos coros para celebrar el culto público, como misas, aniversarios… Hubo algún enfrentamiento con el Cabildo Catedral debido a esas exenciones y privilegios de la Real Capilla, donde se les humillaba en procesiones públicas, por lo que tuvo que intervenir el rey Felipe II para que la catedral no se entrometieran en la Real Capilla de San Marcos.En cuanto a la apariencia, el exterior de San Marcos, construido en piedra de sillería uniforme, se distingue por su sencillez y robustez, sin gran ornamentación, en línea con el estilo románico.Estas observaciones fueron compartidas por Joaquín de Vargas, arquitecto salmantino, quien también argumentó que la iglesia fue construida en dos etapas, señalando que hay diferencias en la mampostería entre la cabecera y el cuerpo principal del edificio.Durante estos trabajos, al desmontar la cabecera para corregir la pendiente del tejado, se observó que los tres ábsides no eran estructuras independientes, sino que formaban parte de un único conjunto integrado en el círculo principal.Este contexto histórico sugiere una posible inspiración extranjera en el diseño de San Marcos, sobre todo dada la función conmemorativa y funeraria que esta iglesia tenía para los reyes de León y Castilla.La forma circular ha sido utilizada en la arquitectura religiosa desde la antigüedad como símbolo de perfección, eternidad y conexión con lo divino.Por tanto, la iglesia de San Marcos parece haber sido pensada con una planta circular desde su origen, posiblemente influenciada por ejemplos extranjeros, y pensada para simbolizar la perfección y eternidad a través de su disposición circular.Sin embargo, la imposta ajedrezada propia del románico no se observa en esta ornamentación.Estos se caracterizan por ser robustos, por sus grandes proporciones y por la dobladura que presentan.En último lugar, los escudos de armas del exterior, correspondientes a una época diferente.Podríamos fechar el primero entre los años 1580 y 1668 que corresponden con la unión de Portugal a España.Las intervenciones realizadas no solo alteraron su aspecto original, sino que también sacaron a la luz importantes hallazgos que han enriquecido el conocimiento sobre su historia y arte, resultando cruciales para devolver al templo algunos de sus elementos históricos más valiosos.En 1599 se añadió un pórtico columnario al templo, que posteriormente fue demolido en 1907 junto con la sacristía exterior.Este pórtico fue sustituido por un pórtico clásico ubicado en la fachada principal, conformado por cinco basas, columnas y capiteles que la Real Clerecía de San Marcos había encargado al cantero Martín Cabal.Durante los trabajos de restauración realizados en 1967, se llevaron a cabo importantes descubrimientos en la iglesia.A pesar del pésimo estado de conservación en el que se encontró la figura, faltando partes como la pierna izquierda, la nariz, los pies y la cruz, pudo ser restaurado gracias al minucioso trabajo de Alfonso Albarrán.Además, se halló un motivo ornamental sin temática iconográfica sobre la puerta norte y una inscripción conmemorativa en el ábside central, cubierta por escombros.Salamanca, tras la expulsión de los musulmanes, estaba siendo poblada por gallegos, portugueses, mozárabes, serranos, francos… que se organizaban en “naturas”, en torno a una parroquia.Desde los 70 hasta hoy en día, es una Iglesia pequeña, del barrio, a la que acuden familias devotas en la fe cristiana.