Iglesia de Santa María la Mayor de San Gil (Molina de Aragón)

[1]​ La primitiva iglesia, en opinión de algunos autores, era un templo románico sencillo, edificado sobre terreno blando y movedizo, y con una «torre airosa y altísima» que alcanzó fama en toda España por su inclinación, al igual que la torre de Pisa en Italia.[4]​ Hacia 1524 comenzó a edificarse la nueva iglesia de San Gil, en un estilo, como señalan algunos autores, «de decadente y fácil gótico, con un mucho de ramplón renacentista», y consta además que a mediados del siglo XVI los recios muros del templo y la nueva capilla mayor ya habían sido construidos.[9]​ Además, la iglesia contaba con dos relojes, como señal de riqueza y «modernismo», y con un destacado órgano, construido hacia 1600 por un «fraile pasajero», del que se afirmaba que «de su tamaño no hay otro más perfecto en España, y si se hubiera de querer dar lo pesarían a oro algunas catedrales».[8]​ El templo, que es de grandes dimensiones, cuenta con dos portadas manieristas del siglo XVI.[2]​ Tras la muerte del maestro de obras, un yerno del difunto y otros canteros continuaron edificando la torre, pero debido a su impericia y a sus cálculos incorrectos, lo que llevaban construido se derrumbó, debido a la inestabilidad del terreno, y poco después otros maestros de obras reemprendieron la construcción, pero aunque se llegaron a gastar 6.000 ducados, la torre quedó inconclusa.