Fue construida en el siglo XVI y en su estructura externa hay elementos arquitectónicos que emulan su época inicial.
[2] En 1834 un fuerte terremoto sacudió a Santa Marta y destruyó parte de la Iglesia.
[4][5] La conflagración se debió al fuego de una veladora, que alcanzó el mantel del altar mayor.
[4] De la catástrofe solo se salvaron la fachada colonial y la escultura del Cristo Negro.
[5] La planta de la iglesia consiste en un rectángulo angosto que se prolonga hasta la calle 12.