[3][4] Durante el gobierno del presidente Germán Riesco, se aprobó un impuesto a la carne importada desde Argentina, lo que generó un fuerte descontento en las clases populares.Este impuesto beneficiaba principalmente a los grandes productores de carne en Chile, mientras que encarecía el producto para la población, dificultando su acceso.El presidente Riesco se reunió con los manifestantes y prometió hacer lo posible para revisar el impuesto, expresando su preocupación por el aumento en los precios de los productos básicos.Estos grupos descolgados iniciaron disturbios, riñas, saqueos y actos vandálicos, atacando negocios, en especial los de extranjeros ‘turcos’ e ‘italianos’.Según estimaciones, durante este periodo se detuvo a 825 personas y hubo más de 500 heridos, entre ellos 65 policías.