Su nombre se debe a que representa un ser humano con cabeza de león.Puesto que poco después estalló la Segunda Guerra Mundial, la figura no fue estudiada inmediatamente y cayó en el olvido, para ser redescubierta al cabo de treinta años.[2] La interpretación es muy difícil debido a su antigüedad; el hombre león tiene muchas similitudes con ciertas pinturas rupestres francesas que también muestran criaturas híbridas (Cueva de Chauvet), pero que son miles de años posteriores.Datadas de entre 35 000 y 40 000 años, estas estatuillas provienen de la cultura Auriñaciense, correspondiente a la llegada del hombre moderno a Europa, al comienzo del Paleolítico superior.El hombre león se encuentra expuesto hoy en día en el Ulmer Museum, de Ulm, Alemania.