[3] Todas las distintas especies del género Hippidion, tenían el tamaño aproximado de un burro actual.
[4] Équidos como estos emigraron a Sudamérica hace 2,5 millones de años aproximadamente.
[3] Los caballos no volvieron a aparecer en América hasta el siglo XVI, como resultado de la introducción por el hombre.
Presentaba un prominente hocico muy característico, debido a un muy desarrollado hueso nasal.
Caracteres craneales y anatómicos sugieren que este género no prefería tanto las llanuras abiertas como su pariente Equus (Amerhippus), al parecer Hippidion estaba mejor adaptado a ambientes cerrados, como bosques y estepas arboladas, donde se alimentaba de vegetales tiernos, favorecidos por un clima más frío y húmedo.