[4][5][6][7][8][9][10][11][12][13][14][15][16] Estas circunstancias influyeron fuertemente para que el presidente radical Raúl Alfonsín adelantara las elecciones presidenciales[17][18] al 14 de mayo de 1989, y para que en las mismas ganara el candidato peronista Carlos Menem.El retraso salarial y la pobreza, que había aumentado del 5 % en 1975 al 37 % en 1982 (datos para el Gran Buenos Aires),[23] anticipaban grandes presiones sociales.La falta de energía eléctrica afectó también el abastecimiento del agua, y Obras Sanitarias de la Nación (OSN) tuvo que distribuirla en tanques a las zonas del Gran Buenos Aires.En esa época, Argentina padecía una fuerte crisis en relación con su deuda externa y Grinspun confrontaba con el Fondo Monetario Internacional (FMI).Se establece un nuevo signo monetario 10 000 pesos Ley 18.188, la inflación en el período 1983-1985 siguió en ascenso llegándose a emitir billetes de 100 000.Al congelarse en mayo la estructura de precios, algunos empresarios cercanos al gobierno habían logrado adelantarse aumentando los precios por anticipado haciendo los primeros importantes ganancias mientras los pequeños comerciantes reclamaban por sus pérdidas.Aunque los sindicatos tenían expectativas mayores aceptaron postergar el pedido de aumento salarial, mientras que los empresarios no respetaban el congelamiento.[28] El éxito del Plan Austral fue efímero y parcial, a pesar de que logró detener momentáneamente la espiral inflacionaria.El alto endeudamiento externo e interno, estancamiento, escasa inversión en bienes de capital e infraestructura y un grave desequilibrio fiscal;[29] se sumó la pérdida del valor del austral, llevada cabo por el Banco Central.Se le quitaron tres ceros a la moneda cambiándole la denominación, pero no el respaldo.Sin embargo, con esas interrupciones no se logró solucionar el faltante energético, en diciembre se restringió a los espectáculos deportivos, la prohibición de la iluminación con fines ornamentales y la supresión de los trabajos nocturnos.Fue así como Obras Sanitarias de la Nación tuvo que distribuirla en tanques a las zonas del Gran Buenos Aires.[35] Ante el temor de disturbios sociales el gobierno descuido el frente fiscal, multiplicando la expansión monetaria.La propia reacción policial fue más bien pasiva durante los dos primeros días, lo que contribuyó a la generalización de los disturbios., la policía fue tomada desprevenida y pronto se vio superada por la masiva dimensión que alcanzaron los tumultos.«Les hablé con el corazón y me contestaron con el bolsillo», fue la frase con la que pintó el dirigente radical su desazón.[41] En enero se produce un segundo brote pudo ser parcialmente contenido hacia el mes de abril por el lanzamiento del Plan Bonex, que consistió en el canje compulsivo de los depósitos a plazo fijo por títulos públicos denominados Bonex 89, aunque agravó la fuerte recesión en la que se encontraba la economía argentina en ese momento.En estos año se dio el ingreso de la Argentina al Plan Brady.También prohibió que el Estado emitiera moneda para cubrir sus gastos, y la indexación de los contratos en pesos.Esta medida permitió detener la inflación y estabilizar la economía.Entre fin de 1990 y 1993 la deuda pública neta del Estado Nacional bajó de 96 472 millones a 90 707 millones, logrando bajar las tasas de interés del 20,7 % anual en 1990 al 2,03 % en bonos a 20 años[44] La productividad por hora trabajada entre 1991 y 1996 aumentó 117 %.La hiperinflación fue un evento altamente importante en la historia argentina y sus consecuencias a largo plazo fueron determinantes en el curso que el país tomaría en los siguientes años.En el historial económico y de desarrollo humano del país, la hiperinflación dejó récords históricos.[51][52] Durante el transcurso de la hiperinflación se llegó al pico histórico inflacionario en Argentina: 20 262 %.En los años siguientes a 1989, el radicalismo debió negociar en desventaja con el peronismo, por ejemplo, en el pacto de Olivos.Los años siguientes a 2001, el radicalismo ocuparía un lugar menor en la escena política, aunque tendría ocasional protagonismo como factor de desempate en contiendas entre peronismo y macrismo.