Hikikomori

Estas personas se ven sujetas a niveles extremos de aislamiento social y confinamiento al hogar debido a diversos factores personales y sociales en sus vidas,[2]​ pudiendo tener su origen en problemas como la agorafobia, acoso escolar, el trastorno de personalidad por evitación, o la timidez extrema.

La mayoría de los hikikomori mantienen contacto con el mundo exterior solamente mediante el ordenador, la televisión y los videojuegos en línea.

Temen que los demás descubran su pasado como hikikomori, y se muestran vacilantes con la gente, especialmente si son desconocidos.

Es difícil conseguir cifras exactas sobre los distintos casos, ya que muchas familias deciden no hablar de este problema.

Los colegios y asistentes sociales pueden hacer preguntas en caso de sospecha, pero normalmente no se involucran en la situación.

En cualquier caso, es necesaria una ayuda psicológica, ya que muchos padres se ven abrumados por los problemas de un hikikomori.

[cita requerida] El doctor japonés Tamaki Saito es precursor en los estudios de esta nueva enfermedad social.

Un hikikomori .