[2] Cerca del lugar donde se hallaron la estatua de Hermes y la mujer había un santuario, probablemente de culto a los héroes, donde se encontró una inscripción honorífica que mencionaba a Egnacia Maximila y Publio Gleitio Galo, benefactores de la ciudad durante el reinado del emperador Nerón (hacia el 65 d. C.), lo que hizo que las dos esculturas se asociaran con ellos.
[2] Finalmente, en 1981 la estatua fue devuelta a Andros, donde se exhibe desde entonces en el museo arqueológico de la isla.
Se creía que esa estatua original era de tipo lisipiano, pero su escultor pertenecía a la escuela de Praxíteles, como demuestra la comparación con Hermes con el niño Dioniso;[4] así pues, se realizó en torno al año 360 a. C.[2] La estatua se encontró sin brazos y sin piernas por debajo de las rodillas (que fueron restauradas posteriormente).
Apoya su peso en la pierna derecha, mientras que la izquierda está ligeramente flexionada.
[2] La comparación con otras copias existentes, en particular la expuesta en el Museo Británico, puede darnos una idea clara de cómo eran las partes que faltaban::[5] el resto de su mano derecha (por debajo del codo) descansaba sobre la cadera del dios, mientras que la clámide que faltaba envolvía el brazo izquierdo ligeramente doblado y caía libremente junto a él.