Se inició a los diez años de edad en radioteatro infantil, para luego pasar al teatro y al cine, y desde entonces se mantuvo en el espectro artístico de Guatemala hasta su muerte.
Uno de sus principales maestros fue el maestro japonés Seki Sano, quien a su vez fue discípulo directo del ilustre maestro de la Escuela de la Vivencia, Konstantín Stanislavski.
Con trayectoria de más de cincuenta años en teatro como actor, director y dramaturgo, incursionó en el radioteatro y la radio educativa.
Fue destacada su participación en numerosos cortometrajes y largometrajes, producciones nacionales e internacionales.
Un hombre que cultivó espiritualidad y armonía.