En la mayoría de los casos, es para los pacientes que desean mayor libertad de horarios y no tienen complicaciones médicas graves para realizar el tratamiento en el hogar.
Con cada vez más largas listas de espera para el trasplante renal, la diálisis domiciliaria reapareció en los años 1990 y proporciona, en algunos centros, una alternativa a los que fallan en diálisis peritoneal o solo desean una alternativa que puedan hacer en su propio hogar.
El tratamiento de diálisis domiciliaria fue la única alternativa y consiguió ampliar su vida otros cuatro años.
La máquina de Nosé consistió en una bobina (para transportar la sangre) colocada en una lavadora doméstica (eléctrica) llenada con el dialisato.
En los últimos 30 años, en los Estados Unidos ha habido una gran declinación de la hemodiálisis domiciliaria.
La hemodiálisis domiciliaria nocturna fue introducida por primera vez en el Reino Unido por Baillod y otros,[20] y creció en popularidad en algunos centros como en Seattle, pero luego declinó en los años 1970 (coincidiendo con la declinación de la HHD).
Desde el principio de los años 1990, la NHHD ha vuelto a ser más popular.
Actualmente, en los Estados Unidos, tres compañías tienen disponible equipos de diálisis domiciliaria aprobados por la FDA.