Heliodoro Peñasco Pardo

Sus penurias concluyeron temporalmente cuando Castelar[2]​ le proporcionó un destino en el Ministerio de Ultramar, conmovido por unos versos publicados por este en su honor.

Finalmente, y pese a la escasez de sus recursos, concluyó la carrera con brillantes resultados.

[3]​ Desde 1907 Peñasco comienza a destacarse por su ideario político como republicano radical, claramente constatable en sus propios escritos.

Como firme defensor de los obreros, abogaba por la intervención correctiva del Estado en materia social sin que esto implicara transformaciones revolucionarias.

El diario republicano El Radical refirió detalladamente y en amplias informaciones los primeros acontecimientos.

El detenido declaró su intervención en el asesinato y acusó a un cómplice, Francisco Sánchez "el Curita", capturado rápidamente por la Guardia Civil.

Por su parte, Juan Rosales, hermano del procesado, es recibido por el juez para tratar asuntos del sumario e intenta entregarle una carta de Melquíades Álvarez[12]​ que contenía ciertas presiones que atentaban contra la independencia del funcionario judicial según Pedro Torres,[13]​ biógrafo de Peñasco y principal fuente con la que contamos para la recreación de los hechos.

Tan sólo Cándido Pérez "Pernales" fue condenado a 17 años de prisión.

La intención de Torres fue contrarrestar las opiniones favorables a los Rosales vertidas en diversos medios conservadores antes del juicio.