HMS Tonnant (1798)

En el transcurso de esta última batalla, el navío tuvo un papel activo, dañando gravemente al británico HMS Majestic, al que le hizo doscientas bajas (50 muertos, entre ellos su capitán Blagdon Westcott, y 143 heridos).

Entre las flotas se produjo un fortísimo combate naval que acabó con los franceses huyendo hacia Galicia, refugiándose en la seguridad del puerto de La Coruña.

[9]​ Al año siguiente, el HMS Tonnant se sometió a un reacondicionamiento en el puerto de Portsmouth, tarea en la que estuvo en el dique seco seis meses.

[4]​ En el marco de la guerra anglo-estadounidense el HMS Tonnant tomó un papel tardío.

A bordo del HMS Tonnant, los estadounidenses John Stuart Skinner y Francis Scott Key cenaron con el vicealmirante Cochrane, el contraalmirante Sir George Cockburn y el mayor general Robert Ross, para negociar la liberación del prisionero de guerra William Beanes.

Tras su liberación, a Skinner, Key y Beanes se les permitió regresar a su balandro, pero se les prohibió desembarcar en Baltimore, al haberse familiarizado con la fortaleza británica de la ciudad y con la posición de los casacas rojas.

Cuando el navío se desvió a Nueva Orleans, su cuerpo fue transportado al barco Royal Oak, que lo llevó a Halifax (Nueva Escocia), donde fue enterrado el 29 de septiembre de 1814.

El HMS Tonnant siguió prestando sus servicios al almirante Cochrane como buque insignia cuando dirigió las fuerzas navales británicas en las batallas del lago Borgne y de Nueva Orleans.

Se vio apoyado, junto al HMS Tonnat por los barcos Armide, Seahorse, Manly y Meteor.

De 1816 a 1817 fue la nave insignia del contralmirante Sir Benjamin Hallowell en Cork.