HMS Audacious (1912)

A las 13.30 el transatlántico RMS Olympic de la compañía White Star Line (que se encontraba próximo), ante la llamada de socorro, se ofreció voluntariamente a asistirlos.

Durante la tarde, el Olympic y el crucero HMS Liverpool intentaron remolcar al Audacious, pero los cabos de remolque, cedían ante el mal estado del mar.

[2]​ A las 18:00, el buque fue abandonado por el resto de la tripulación, y a las 20 horas 45 minutos, el buque quedó con la quilla al sol, convirtiéndose en el primer acorazado británico perdido en la Primera Guerra Mundial, y el único sin pérdidas de vidas humanas propias.

La Marina Real intentó mantener en secreto la pérdida, por lo que el buque permaneció en la lista de buques en servicio durante toda la contienda, pero el intento fue inútil, ya que muchos pasajeros norteamericanos del Olympic habían presenciado y fotografiado el hundimiento.

Un comité de la Marina Real, juzgó que un factor principal en la pérdida del HMS Audacious fue que las puertas herméticas que separaban los distintos compartimientos no estaban trabadas, y como prueba, se basó en que el HMS Marlborough, de la siguiente (y parecida) clase Iron Duke, fue torpedeado en la Batalla de Jutlandia, y pudo seguir navegando aunque a una velocidad reducida a 17 nudos.

El HMS Liverpool (a la izquierda) junto al HMS Fury y al RMS Olympic , intentan tomar al HMS Audacious a remolque. La imagen fue tomada desde el área de pasajeros del RMS Olympic .
La tripulación del HMS Audacious toma los botes salvavidas para dirigirse al RMS Olympic .