Por ella sola, debido al escaso texto que conserva, no se podía decir mucho de su significado, pero 30 años más tarde se encontró una piedra miliaria en Santiponce, la que conservaba el texto completo.
Con estos hallazgos se ha podido establecer relativamente el recorrido de la calzada romana nº XXII que unía la desembocadura del Guadiana con Mérida.
Durante siglos, este territorio fue un asentamiento musulmán, pero existe poca documentación de ello.
La hechura del nuevo templo sobre las ruinas del viejo debió ser costosa para la época, dado que en los archivos documentales esta iglesia consta en construcción al menos hasta el año 1560, y es a partir de entonces cuando empieza a funcionar con un párroco que la asiste y se encargan los retablos que completarían el conjunto.
Cuenta con una espadaña neoclásica con dos cuerpos, el primero consta de dos campanas (San José y Ntra.
Por otro lado, en el último retablo está el Crucificado de la Vera Cruz, con la Virgen y San Juan.
En la nave central, concretamente en el antepresbiterio, al lado de la Epístola, existe una pintura mural del siglo XVIII que representa a Santa Lucía.
Epicentro social, económico, familiar, político, festivo de Guillena durante largos años.
Que más da su forma, su estructura, su fuente, sus jardines... Lo importante es sus papel social.
En ésta destacan las pilastras de orden gigante que recorren los pisos del edificio.
Se conserva en su archivo histórico el Catastro de Ensenada (s. XVIII), considerado el primer inventario del territorio español.
En los años 45 y 50 torea los toreros locales Mariano Ortega, los hermanos Alvarados, Antonio Álvarez de Las Pajanosas, El Algabeño Luis Arena, Emilio Oliva, etc.
En los años '59 al '66 se le hace reforma levantando la pared del ruedo copiando un empresario la plaza organizando festejos taurinos toreando los novilleros locales Juan Punta, José Guillén, Rafael Aguilera, que incluso torearon el a Maestranza de Sevilla, la nave principal de la Plaza de Toros sirve para Matadero Municipal.
Desde esa fecha hasta el año 90 se abandona aunque algunas veces en la feria organizan un festejo, se meten tres familias para hacer presión al Alcalde para que le den una vivienda durante varios meses queman todas las puertas, chiqueros y burladeros dejándola en muy malas condiciones de abandono.
En el año 1994 por este Delegado organiza una Escuela Taurina con más de 50 alumnos inscritos y como Director Artístico al Diestro de Linares José Fuentes, que salen diestros destacados Jose Luis Osuna, Rubén Pinar, El Arqueño t Francisco Charro, etc.
A este recinto cerrado se ingresa por un pórtico cuadrangular con dos arcos de medio punto de ladrillo, en cuya rosca se dibuja un fino motivo en zigzag que evoca modelos almohades.
Interiormente, las distintas estancias, como salones, capilla, dormitorios y áreas de servicio, se distribuyen en torno a un patio que centra el conjunto.
Los huecos al exterior son escasos y únicamente predomina el vano sobre el muro en uno de los salones orientados al sur, junto a la torre del homenaje, donde se abre un mirador acristalado compuesto por arcos rebajados que apoyan sobre columnas marmóreas.
En ella se representan escenas costumbristas y bíblicas del Nuevo Testamento que comprenden desde la Anunciación a la Virgen María hasta Jesús perdido en el templo.
Se representa lo más fiel posible la vida en tiempos bíblicos, cuidando los detalles históricos.
Los personajes permanecen totalmente inmóviles durante las tres horas aproximadas que dura el cortejo en la calle.
Cada carroza cuenta con un responsable, que es convocado por la Junta Directiva de la Asociación varias veces al año donde se reúnen para exponer sus ideas y tratar asuntos relacionados.
Representa un misterio poco habitual El encuentro de Jesús con María camino del monte calvario.
Ambas imágenes han sido restauradas en 2015, la dolorosa por Pedro Manzado y el nazareno por su autor, el escultor Ramos Corona.
Una antigua tradición, hoy desaparecida en el municipio, era la de tirar caramelos desde las casas al paso del cortejo, donde niños y mayores disfrutaban.
Desde el 2004 no regresa a su parroquia y hace su entrada en la capilla de Ntra.
Sra de la Esperanza, donde permanece varios días hasta su regreso a la parroquia en un pequeño traslado.
Pero esta costumbre volvió este año 2016, regresando así a su Parroquia.
Algunos historiadores la catalogan como obra anónima de finales del XVIII, fecha en la que debemos situar su neoclásico retablo.
Actualmente cuenta con dos mantos procesionales, ambos en rojo, el antiguo bordado en oro por Carrasquilla y el nuevo ejecutado por Grande de León.