En general, los guardamuebles se alquilan con base en una periodicidad y el cliente puede guardar sus pertenencias en «unidades», «depósitos» o «habitaciones» durante el tiempo abonado.Los enseres no están habitualmente asegurados por la empresa que los custodia,[cita requerida] sino que se almacenan en situación de riesgo propio del inquilino o protegidos bajo una póliza contratada por el usuario de self-storage.Son guardamuebles situados en el interior de un edificio, donde cada «unidad», «depósito» o «habitación» tiene su propia puerta.[6] Es la utilización del guardamuebles desde una índole empresarial; por ejemplo, a causa de exceder un inventario o para conservar documentos, ordenadores, archivos y herramientas.[7] Gédéon Berbier du Mets fue el primero a quien se nombró director de dicha institución, que tuvo un estatus errante durante mucho tiempo.
Varios guardamuebles en exterior
Guardamuebles con puerta enrollable.
Pasillo de acceso a puertas con bisagras de fijación lateral.