Gregorio de Valencia

Estudió Teología en la misma universidad (1567) donde -a través del Maestro Mancio- recibíó una fuerte influencia del movimiento de renovación teológica iniciado por Francisco de Vitoria.

Alternó sus estudios teológicos entre Valladolid (1568-1571) y Salamanca (1572).

Profesor y director del Colegio Romano de los jesuitas en Roma (1598) a petición del Papa, Clemente VIII, defendió ante la Curia Romana la doctrina del también teólogo español Luis de Molina sobre la gracia y la predestinación (1600).

Su obra se distingue por una renovada teología escolástica en la que se hace uso abundante de los lugares teológicos y, por otro lado, no descuida el empleo de la razón natural desarrollando a fondo el contenido de las fuentes teológicas.

Aparte de diversas lecciones, obras de controversia y varias apologías y discursos, sus principales tratados doctrinales son:

Commentarii theologici , 1603