Su tumba se encuentra en el campus central de dicha universidad guatemalteca.
[2] Gregorio Yujá Xoná[1] nació en una familia campesina en la región de El Quiché en Guatemala.
Cuando los periódicos del país no se atrevieron a publicar sus demandas por temor a serias represalias,[3] y luego de que se agotaron todas las vías legales para ser escuchados, el grupo decidió tomar las instalaciones de la embajada de España y utilizar dicha toma como palestra de sus demandas aprovechando la inviolabilidad diplomática del recinto.
[c][3] Tras el hecho, los únicos dos sobrevivientes fueron el embajador Máximo Cajal López[d] y Yujá Xoná, quien se salvó por haberse escondido debajo de todos los que se encontraban dentro de la habitación.
La situación dentro del campus central se tornó tan peligrosa, que los estudiantes universitarios decidieron que su cuerpo fuera sepultado en la Plaza de Héroes y Mártires dentro del mismo campus central, en donde ha permanacido desde entonces.