Gran Oriente de Italia

Pero después fue dispersándose y se concentró solo en unas pocas logias del sur hasta que el Risorgimento le dio un nuevo empuje.

Su organización anduvo al paso con el proceso de unificación italiana.

Entre sus grandes maestres figuró Giuseppe Garibaldi, nombrado primer masón de Italia ad vitam en 1864.

[1]​ Elegido gran maestre en 1904 el escultor Ettore Ferrari, autor del monumento a Giordano Bruno (1889) en el Campo de' Fiori de Roma, imprimió al Gran Oriente una más neta orientación radical y anticlerical, que causó gran división sobre todo cuando, en 1908, Ferrari propuso castigar a los miembros del Gran Oriente que se habían negado a votar en la Cámara de Diputados la moción de la socialista reformista Leonida Bissolati destinada a abolir la "enseñanza de la religión en las escuelas primarias"; por tal motivo en ese año hubo una escisión que creó una nueva obediencia masónica guiada por el pastor protestante Saverio Fera.

Antes de la marcha sobre Roma (1922) destacados masones apoyaron el fascismo, pero la francmasonería fue suprimida por Benito Mussolini en 1925 y sus bienes confiscados.