El Gran Arquitecto es una alegoría que designa al principio creador, para algunos a Dios.
Los masones son libres de creer en el Ser Supremo que se ajuste a su creencia personal.
En ese sentido la fe, la esperanza y la caridad forman parte de las tres virtudes teologales, es decir la unión con Dios.
Los masones abren y cierran los trabajos consagrados "A la Gloria del Gran Arquitecto del Universo" y las Tenidas en las logias; dichos trabajos, para los masones pertenecientes a la masonería liderada por la Gran Logia Unida de Inglaterra, son en realidad un culto al ser supremo, donde se pide a Dios bendecir el recinto como un lugar sagrado donde se alabará su nombre.
En ese sentido, la masonería siguiendo su tradicional método de enseñanza (deductivo), analiza el universo y la perfección que reina en él y concluye que esta no puede ser la obra de otro que no sea del "Gran Arquitecto Del Universo".