Se lo considera como el primer independentista que intentó separar Sudamérica de la Corona española.
Gonzalo Martel de Cabrera había nacido hacia 1562 en la ciudad de Cuzco,[1] capital del corregimiento homónimo que a su vez era una dependencia directa del Virreinato del Perú.
[4][5] Sus bisabuelos maternos eran el teniente de gobernador general panameño Diego Gutiérrez de los Ríos y Aguayo y su segunda esposa Beatriz Lasso de Mendoza Luna y Saavedra, y por ende, Gonzalo Martel de Cabrera era chozno materno de Íñigo López de Mendoza y Luna, II duque del Infantado, y de su cónyuge María de Luna y Pimentel.
[3] Gonzalo Martel de Cabrera tenía una personalidad preparada y decidida, con un carácter impulsivo y fogoso debido a que él mismo había sido testigo presencial de la injusta ejecución de su padre, además de sufrir posteriormente diversos vejámenes por ello.
[3] Por lo antedicho pudiera ser el causal de una probable venganza de aquellos responsables y cómplices del asesinato de su padre, lo que llevaría a tener la idea más grande de conquista para su tiempo, la cual consistía en tomar el gobierno del Virreinato del Perú y sus gobernaciones autónomas del Tucumán y del Río de la Plata y Paraguay, independizándolos de la Corona española.