Gilberto Villarreal Solís

Desde su infancia, Villarreal mostró una gran pasión por el béisbol, influenciado por la rica tradición deportiva de Culiacán, una ciudad profundamente conectada con el beisbol gracias a la llegada de trabajadores estadounidenses durante la construcción del Ferrocarril Sud-Pacífico a principios del siglo XX.

A lo largo de su formación, “Gilillo” demostró una notable capacidad para jugar en diversas posiciones del campo, pero fue como shortstop donde brilló con mayor intensidad.

“Gilillo” comenzó su carrera profesional en 1943 con el equipo “Culiacán” de Antonio “Pachuco” Zazueta Villa.

En la UAS, “Gilillo” continuó transmitiendo sus conocimientos y su amor por el juego a nuevas generaciones de peloteros.

Gilberto “Gilillo” Villarreal sigue siendo recordado como un ícono del béisbol mexicano, no solo por su habilidad en el campo, sino por su ética de trabajo, su dedicación al deporte y su contribución a la historia del béisbol en México.