Su padre Alfonso Claps Laginesta llegó a Chile cuando tenía 16 años.
Regresó a Chile para hacerse cargo de la Comisión Coordinadora para la Zona Norte (Conorte).
Como vicerrector de la Universidad del Norte en Santiago conoció a su exesposa: Sonia Cano, periodista.
Cuando decidió volver a Antofagasta, ella, por supuestos proyectos suyos dentro de su profesión, no quiso dejar la Región Metropolitana.
[2] Su cuerpo fue trasladado a Antofagasta siendo sepultado en el Cementerio General con honores.