La geometría egipcia estaba muy desarrollada, como admitieron Heródoto, Estrabón y Diodoro, que aceptaban que los egipcios habían «inventado» la geometría y la habían enseñado a los musulmanes grecolatinos; aunque lo único que ha perdurado son algunas fórmulas –o, mejor dicho, algoritmos expresados en forma de «receta»– para calcular volúmenes, áreas y longitudes, cuya finalidad era práctica.Sobre el origen de la geometría tenemos básicamente dos fuentes, Heródoto y Aristóteles, que coinciden en situarlo en la civilización egipcia, aunque pensando posiblemente en unas raíces mucho más antiguas.Con este método dibujaban en el suelo triángulos rectángulos de lados 3, 4 y 5.Gran parte fue desarrollada por los escribas, funcionarios instruidos y cultos del antiguo Egipto que recibían lecciones de cálculo y escritura.Es discutible si estos documentos implican profundos conocimientos o representan en cambio todo el conocimiento que los antiguos egipcios tenían sobre la geometría.Se dividía en medidas inferiores, como el palmo y el dedo.Ese modo material de entender la ciencia se traduce en el modo en que los escribas del Imperio Medio plantean los problemas.Los escribas calcularon los volúmenes que les interesaban, como no podía ser menos, dedicándose a la pirámide, tronco de pirámide y cilindro.(En el Imperio Medio, época de la que datan los textos conocidos, todavía se edificaban pirámides).Los escribas necesitaban conocer la capacidad de los recipientes empleados en los almacenes, en su mayoría casi cilíndricos, tanto para llevar la contabilidad de lo almacenado como para pagar a los obreros y artesanos o cobrar los impuestos.Primaba también el utilitarismo, como en todos los problemas, el estudiante no tenía más que cambiar los números para llegar al resultado correcto, en este caso el volumen dado es el área del círculo de la base (según el sistema ya visto), multiplicado por la altura del recipiente.
Codo
y pesas egipcias. Louvre.
Reconstrucción del procedimiento egipcio para calcular el área del triángulo.