Genocidio de Ruanda

[2]​ La violencia sexual fue generalizada; se cree que fueron violadas entre 250 000 a 500 000 mujeres durante el genocidio.En Ruanda, a partir del siglo XIX, el gobierno colonial belga estableció un sistema social racista para lo cual utilizó una antigua distinción dentro de la etnia banyarruanda del pueblo bantú, a la que pertenece casi toda la población, organizándolas institucionalmente como castas, aun cuando no existía ningún rasgo étnico ni lingüístico específico que las diferenciara: la minoría tutsi (15 %) fue establecida como casta dominante y la mayoría hutu (85 %) como casta subordinada, sometida incluso a regímenes de trabajo forzado.Con la colonización belga, el sistema sociopolítico se reforzó a favor del estamento dominante: los tutsis.La masa campesina accedía a la enseñanza y el país, sin demasiados recursos, progresaba.Catorce mil personas son devueltas a Ruanda, mientras que otras 150 000 se refugian en las montañas.Por otro lado se puede destacar que hubo entre las víctimas miles de ciudadanos hutus muertos a manos del FPR.[cita requerida] Diversos testimonios nos aclaran que los militares del Frente Patriótico Revolucionario cometieron igualmente asesinatos masivos.Pese a todo, está claro que los tutsis fueron masacrados: se eliminó al 75 % de su población durante el genocidio.Fueron testigos de las matanzas indiscriminadas en la zona donde residían y pudieron constatar, al ser hechos prisioneros, como los que aparentemente parecían milicianos Interhamwes (radicales hutus) no eran sino mercenarios contratados por el ejército tutsi, los cuales realizaron, según Marcel Gérin, las mayores matanzas en la zona donde residían.Este hecho confirma claramente las sospechas del comandante acerca de una trama oculta llevada a cabo por los radicales hutus.Por el contrario, se ordenó la retirada de los cascos azules, dejando a la población civil sin protección.También, en la entrevista concedida por el general Romeo Dallaire a Sol Alameda, este recuerda hechos que aún no ha logrado olvidar y que le han mantenido bajo tratamiento psquiátrico durante varios años: Como podemos comprobar, el nivel de violencia en Ruanda era extremo y respondía a un desenfreno de las pasiones más bajas.Estas se refugiaron del conflicto en la Escuela Técnica Oficial (ETO) pero fueron asesinadas a los pocos días.Ante este hecho, el 4 de mayo, Boutros Ghali va más lejos y utiliza, por primera vez, el término «Genocidio» para describir lo que estaba ocurriendo en Ruanda, lo que coloca a Bill Clinton, junto a otros importantes dirigentes internacionales, en una situación embarazosa.Mientras tanto, un comunicado del día 19 de mayo emitido por la Cruz Roja calcula en medio millón los ruandeses asesinados.Pasan las semanas y la misión UNAMIR, por falta de acuerdo entre los países que la componen, no está operativa.En 1994 las milicias hutus, llamadas Interahamwe (que significa "golpeemos juntos"), son entrenadas y equipadas por el ejército ruandés entre arengas y ánimos a la confrontación con los tutsis por parte de la Radio Televisión Libre de las Mil Colinas (RTLM) dirigida por las facciones hutus más extremas.Según Linda Melvern, una reportera británica que tuvo acceso a documentos oficiales, el genocidio estuvo bien planeado.En el momento en que comenzó la matanza, la milicia ruandesa la componían treinta mil hombres (uno por cada diez familias) y organizados a lo largo del país con representantes en cada vecindario.Otras armas, como granadas no requirieron ningún papeleo y se distribuyeron masivamente.Por su parte, la religiosa María Kisito Mukabutera fue sentenciada a 12 años de cárcel por el mismo cargo.[34]​ Sin embargo, Human Rights Watch también informa de otros que fueron mártires por defender a las víctimas del genocidio.Todo hasta que la misión UNAMIR lograra reunir a los 5500 soldados necesarios para hacerse cargo de la situación.Apoyó al gobierno hutu con armamento para evitar la invasión del FPR y otras incursiones de los tutsis.[15]​ Guillaume Ancel, exteniente coronel francés, ha sostenido que Francia facilitó armas a los Hutus, bajo la cobertura de la operación Turquesa.Este retraso provocó tensiones entre las partes ya enfrentadas: FPR y gobierno de Habyarimana.[14]​ Es sabido que el subsuelo del Congo contiene yacimientos de cobre, niobio, cobalto, zinc, plata, diamantes, uranio, cadmio, carbón, petróleo, coltán y otros metales raros, pero sobre todo concentraciones de oro en cantidades excepcionales.Poco tiempo después del término de la crisis local, ésta se trasladó a los vecinos Zaire, Burundi y Uganda.Theoneste Bagosora fue encontrado culpable por un tribunal de la ONU y condenado a cadena perpetua.Además, los jueces condenaron a los oficiales Aloys Ntabakuze y Anatol Nsengiyumva por su participación en el genocidio.
Mapa actual de Ruanda.
Evolución demográfica de Ruanda. Obsérvese el acusado descenso en la primera mitad de los años 90 provocado por las condiciones económicas del país y el genocidio.
Kofi Annan
Cuerpos en una fosa común
Roméo Dallaire fue Comandante de las Fuerzas de UNAMIR en Ruanda.
Bill Clinton; presidente de Estados Unidos en 1994
Zona de Refugiados en Zaire
La Escuela Técnica Murambi , donde muchas víctimas fueron asesinadas, es ahora un museo del genocidio.
Huérfanos en Kigali.
Un soldado francés, que forma parte de la fuerza internacional de apoyo a los refugiados, ajusta el alambre de púas que rodea el aeropuerto.