Gárgamel es un monje expulsado de su orden debido a que practicaba la magia negra y a su intención de enriquecerse mediante la alquimia.
Vive, junto a su gato Azrael, en una pequeña ermita abandonada en medio del bosque donde viven los pitufos, y su máximo afán es capturarles a toda costa.
Aunque en un primer momento quiere hacerlo para obtener la piedra filosofal, finalmente lo quiere conseguir debido al odio que ha llegado a profesar hacia esas criaturas azules.
Este brujo es el creador de Pitufina, una guapa hembra-pitufo creada para sembrar el mal en la aldea pitufa, aunque contra todo pronóstico, finalmente la criatura acaba del lado de los suyos.
[2] Los pitufos, por el contrario, serían una apología del comunismo o el nacionalsocialismo.