Nieto y sobrino de alcaldes mozárabes toledanos que celebraban sus juicios en árabe y escribían en esta lengua sus documentos.[3][4][5][6] Fue gran amigo y confidente del rey de Castilla Sancho IV, al que acompañó siendo infante en sus estudios en París, es nombrado canónigo de Toledo en 1255, y cuatro años más tarde obtiene licencia para estudiar derecho civil durante cinco años, con toda probabilidad en la italiana ciudad de Bolonia.En 1262 es nombrado por el Papa deán de Toledo, obteniendo un año después nuevamente una dispensa por tres años para cursar estudios de teología.Una vez liquidadas éstas, regresa en 1284 a Toledo, coincidiendo con la muerte del rey Alfonso X, e inicia un proceso de restauración en la administración de la archidiócesis.[7] Muerto en Roma, fue sepultado en la basílica de Santa María la Mayor de esta ciudad, hasta que dos años después el arcediano de Toledo Ferrand Martínez viajó hasta allí para trasladar sus restos a la catedral toledana.