[5] Apoyó a Enrique en sus negociaciones con Roberto el Piadoso, rey de Francia.
En el Acta Synodi Atrebatensis[6] se recogió un sumario de la doctrina cristiana tal como se concebía en el siglo XI.
Entre otras cuestiones, se citaba la práctica de las paces.
Según el texto, los herejes quedaron convencidos con el magisterio de Gerardo, renunciaron a la herejía y se reconciliaron con la Iglesia.
[8] Los textos realizados en ese scriptorium durante esa época muestran una técnica de escritura innovadora: la separación de las palabras mediante espacios.