Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey

Durante 60 años se dedicó exclusivamente a la elaboración de artículos de fierro y acero no planos, tales como rieles, alambrón, varilla corrugada, estructuras, ruedas para ferrocarril y demás.[12]​ Esto no impidió que se editara el Manual para Constructores, obra que sería utilizada para la industria de la construcción[12]​ y usada como referente por más de 50 años.Tiempo después, unos de los trabajadores que logró sobrevivir, según relato del mismo "fue requerido minutos antes de la tragedia, el se retrasó un poco al guardar viandas de alimento y tras arreglar un pequeño desperfecto que le reportó un operador, cuando estaba por alcanzar a sus compañeros en el horno No.4, la tragedia se hizo presente y él quedó como testigo".Para ponerlo en marcha se obtuvieron créditos por casi 900 millones de pesos.El plan tenía como meta incrementar la producción de 900 mil a un millón de toneladas anuales, pero este objetivo se vio obstaculizado en 1970 por los 131 días en los que estudiantes, obreros y pobladores del lugar mantuvieron bloqueado el acceso a la materia prima del Cerro del Mercado, Durango, lo que ocasionó fuertes daños a la economía de Fundidora.El primer consejo de administración estuvo formado por Antonio Basagoiti Arteta, Eugenio Kelly, León Signoret, Tomás Braniff, Vicente Ferrara, Isaac Garza, Valentín Rivero y Gajá, Ernesto Madero Farías y Adolfo Zambrano.El alto horno número tres fue declarado monumento y es protegido mediante una ley de patrimonio.
Alto horno 1 de la Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey.