Su propósito era el control de los pasos alpinos del Camino Español desde y hacia Milán, frente a la amenaza francesa, y fue financiado mediante la recaudación de impuestos en Como.
La puerta de entrada, con un puente levadizo y dos puestos de guardia, se abría hacia el sur en forma de tenaza, otra pequeña puerta se abre en el lado norte.
Una de las torres circulares fue demolida en 1916 para reducir la visibilidad del fuerte.
Dentro del recinto se encontraba la iglesia de Santa Bárbara, patio de armas, cisterna, cuarteles de las tropas, la residencia del comandante, el hospital y otras dependencias como horno o molino.
En la actualidad, todavía son visibles los restos de las murallas, el edificio de mando, el molino y la panadería, así como la iglesia dedicada a Santa Bárbara.