Fuero de Jaca

Está redactado en latín con aclaraciones en romance y es muy breve (se hacen constar unos veinticuatro preceptos).

Parece inspirar el Fuero de Olorón, en Francia, y se extiende por los territorios aragoneses pirenaicos o cercanos.

A fines del siglo XII, el Fuero de Jaca está prácticamente vigente en la «Montaña», y aun en la «Tierra nueva» situada al sur, donde se desarrolla la vida ganadera y mercantil, que tiene su foco de contratación en la feria anual que se celebra en la ciudad, contrastando con la tradición visigoda del Liber Iudiciorum.

Al desarrollarse el ordenamiento nacional aragonés, con base en la foralidad militar o de infanzones y en la tradición visigoda, los foristas siguen elaborando redacciones del Fuero, cada vez más extensas y adaptadas a la nueva situación, y que no se limitan al ámbito local de Jaca, aprovechándose entre otros sitios, como en Huesca.

En el Archivo Municipal de Jaca se conservan tres copias del Fuero.

Fuero de Jaca en el Libro de la Cadena del Concejo de Jaca . Obra completa.