Francisco Reyero

Fue más conocido como Francisco Reyero, nombre con el que incluso llegó a firmar.

Su primera formación musical pudo ser en la Catedral de León, cuya documentación da a entender que Reyero tuvo algún cargo en la capilla musical sin que se puede concretar más.

[4]​[1]​ En Burgos dispuso de una capilla de músicos excelentes, entre los que se contaban los organistas Cándido Eznarriaga y Ciriaco Olave, el bajonista Mariano Tafall y los coristas Agapito Sancho, Evaristo García Torres y Wenceslao Fernández.

Estuvo muy activo en el cargo, introduciendo numerosas mejoras, realizando los exámenes necesarios para el ingreso de nuevos músicos y ocupándose de otras actividades habituales.

A partir de 1861 ya había tenido que sustituirlo en diversas ocasiones el organista Agapito Sancho.